Título- Nostradamus: La Clave del Destino.
Autor- Lourdes Dergal.
Nick- Dana Keil.
E mail- d_keilah_sARROBAyahoo.com
Spoilers- mmm... ninguno en especial.
Disclaimers- Mulder y Scully no son propiedad mía Ah! Pero eso
si que ya me los robé un ratito y no pueden hacer nada...
Rating- R
Summary- Qué ocurre cuando se quiere cambiar el destino?
Tipo- Weird, x file
Nota- La verdad es que sse me ponía la piel chinita mientras
lo escribía... jejeje
Feedback- Qué más puedo decir...!!!!!
Dedicatorias- Dedicado a Gill q si no me hubiera mi hermano
sacado del chat por hablar tanto contigo, no hubiera hecho ese coraje, ni luego
hubiera puesto mi cara de enojo hacía el librero y visto el libro de
Nostradamus... (algo confuso pero así fue!)
DOWNTOWN ANNAPOLIS, MARYLAND
14:13 PM
Los agentes especiales Fox Mulder y Dana Scully arribaron a
la trágica escena del crimen. Avistaron desde lo lejos las patrullas y sirenas
que les mostraban sin prudencia el camino hacia el lugar del asesinato.
Entraron en el antiguo edificio y subieron por el elevador hacia el segundo
piso en donde se encontraba el cadáver tan misteriosamente asesinado. Caminaron
por el largo y oscuro pasillo de paredes forradas con un papel tapiz que en
alguna ocasión fue de color ambar. Entraron por la puerta abierta del pequeño
departamento mostrando sus identificaciones que los reconocían como agentes del
FBI. Al verlos entrar, un hombre vestido con gabardina color negro se acercó
presentándose.
-Soy el detective James Howards, me han asignado la investigación de este
homicidio.
-Somos los agentes Mulder y Scully del FBI.- Se apresuró a
añadir él.
-Qué tal agentes. Pasen por aquí.- Expresó amablemente
mostrándoles el camino hacia la víctima.- Éste es el cuerpo de Bernard
Cavenright, un hombre divorciado de 54 años., que se dedicaba a leer la mano en
un local cercano.
Ambos se acercaron para mirar más de cerca el cuerpo del
hombre. Estaba puesto boca abajo. Scully tomó un par de guantes esterilizados
del bolsillo de su chaqueta y le facilitó uno a Mulder. Juntos voltearon el
cadáver del obeso hommbre. Su sorpresa fue mayor al ver la causa de la muerte
del hombre: una especie de resorte introducido con gran potencia por el ojo
izquierdo.
Esto provocó en Mulder una expresión de asco, mientras que
Scully se limitó a mirar sin expresión alguna.
-No hay testigos, y el velador y portero niega haber visto
entrar o salir a alguien.- Dijo Howards proporcionándoles toda la información
que tenían en ese momento acerca del caso.
Scully hizo una mueca dando a entender lo difícil que iba a
resultar el caso. Mulder se inclinó de nuevo hacia el cuerpo de la víctima y
empezó a revisar los bolsillos de su pantalón. Con la mano derecha enguantada,
pudo sentir un pequeño trozo de papel en el bolsillo trasero de su pantalón.
Enseguida llamó a Scully y ella se aproximo hacia él, se
puso en cuclillas y recibió el papel. Era una inscripción, una especie de
revelación. Lo leyó en voz alta:
-"En quinientos años en mayor estima se tendrá
al que fue ornato de su tiempo.
Luego, de pronto, gran claridad dará
que en éste siglo los pondrá muy contentos"
Dirigió su mirada hacia Mulder. Él no le prestaba attención,
miraba hacia la nada. Descepcionada releyó en silencio el pequeño papel, cuando
de pronto, Mulder la interrumpió.
-Nostradamus, La Aparición de la clave del destino. 1er
cuarteta.
Scully, sorprendida, le dirigió una mirada de peculiar
asombro, él se limitó a contestarla.
Scully bajó la vista y en voz baja y tono bromista le dijo:
-Parece que siempre te interesa descubrir lo desconocido más
allá de hombrecillos verdes.
-Nostradamus simplemente nos dice lo que nosotros no sabemos
escuchar.
-Creo que conozco otro de tus ídolos, ahora no es
precisamente un alien beisbolista sino un hombre fuera de sí que atinó en la
muerte de un rey francés.-Dijo Scully poniéndose de pie y avanzando junto con
Mulder hacia la puerta.
-Nostradamus predice -en el parrafo que acabas de leer- que
en quinientos años, o sea en el 2055, se descubrirá una especie de libro que
revele la respuesta a sus enigmáticas frases.-Dijo Mulder tratando de
impresionar a Scully con su buena memoria.
Scully, después de oir esto añadió en forma juguetona:
-Ah! o sea que el 2055 es el número de la suerte!
En ese preciso momento Scully cerró la puerta del
departamento con un azote estruendoso. Un aire helado trepó por sus entrañas.
El número del apartamento era ese... 2055...!
Esto no era todo, debido al fuerte golpe con el que Scully
cerró la puerta, deslizó un pequeño trozo de papel similar al anterior.
Scully estaba horrorizada; miraba fijamente el número de la
puerta. Mulder recogió el papel y leyó lo que estaba escrito en él:
-"Para conservar el secreto de estos acntecimientos,
conviene emplear frases y palabras enigmáticas en sí mismas, aunque cada una
responda a un significado concreto".
Con voz entrecortada y temblorosa Mulder dijo:
-Nostradamus en una carta enviada al rey Enrique II antes de
que este muriera como él había profetizado...
Ambos se quedaron mudos... era un silencio extenuante que
provocaba el más recóndito de los temores.
Se miraron el uno al otro; ambos rostros reflejaban lo
mismo... terror.
OFICINAS CENTRALES DEL FBI
16:32 PM
Los dos agentes se encontraban es su pequeña oficina ubicada
en el sotano. Habían ido hasta allí por la exclusiva razón de mostrarle a
Scully que lo que Mulder afirmaba era verdad.
-Mulder estas diciendo que a este hombre lo asesino una
profecía de hace más de cuatrocientos años?- Dijo Scully incrédula.
-Lo que pasó hace un momento que fue entonces?
-Mulder, pudieron haber sido mil cosas, que él hombre estaba
obsecionado con las profesías de Nostradamus, es más! Hasta a lo mejor por eso
escogió ese número de departamento!
Mientras Scully hablaba, Mulder abrió un libro que había
sacado del librero que tenía por título "Las Profecías del futuro".
Buscó en el índice la página que correspondiera al tema que
buscaba; era la página 81. En el momento que ubicó la página 81, esbaló un
trozo blanco de papel. Scully miró a Mulder sorprendida; Mulder leyó el trozó
de papel:
-"Bajo la tierra de Guienne (Guyana) por el cielo
golpeada,
cerca de allí se esconde el tesoro,
que por largos siglos peraneció secreto,
morirá quien lo halle, con el ojo atravesado por
resorte."
Mulder no tuvo que decirle de que libro venía esa cuarteta.
En ese momento sonó el teléfono alámbrico que estaba sobre
la mesa de Mulder y Scully atendió a la llamada.
Al terminar la llamada, con el rostro lleno de confución y
sorpresa entremezclados, Scully le dijo a Mulder:
-Ha ocurrido un asesinato de iguales carácterísticas, en la
calle Guyana #2055...
NORFOLK, VIRGINIA
CALLE GUYANA
19:23 PM
Mulder y Scully entraron a la casa de tarot en donde decenas
de policías y detectives hacían su trabajo. Mulder llevaba bajo el brazo
izquierdo el grueso libro en donde estaban registradas las profecías. Se
acercaron al fondo de la sala y, como les habían informado con anterioridad, la
mujer había fallecido a causa de un resorte que le había sido introducido en el
ojo izquierdo. Como en el homicidio anterior, no había testigos, y ninguno de
los vecinos había escuchado alguna señal de auxilio o de alerta.
Scully se acercó -como acostumbraba- a revisar los títulos
de los libros y el interior de éstos en uno de los libreros de la habitación.
Leyó interesantes títulos, todos acerca del futuro incierto de la vida; Scully
se detuvo en seco. Había 3 ediciones distintas en donde registraban y
estudiaban desde perspectivas diferentes los vaticinios del médico, astrónomo y
astrólogo, Michel de Nostradamus.
Scully llamó a Mulder para que diera una posible teoría al
caso. Mulder observó detenidamente los tres volúmenes. Tomó el primero y se lo
mostró a su compañera. Era el mismo que Mulder guardaba en el librero de la
oficina del sótano, y que ahora llevaba bajo el brazo. Colocó el libro sobre un
tablón de madera, y tomó los otros dos libros. Examinó la portada de ambos
junto con Scully. Después tomó el tercero y buscó en el índice la página que
llevara el título de "La Clave del Destino". Llegó hasta la página y
no encontró nada, ni una señal; ni un trozo de papel. Después tomó el segundo,
y de igual forma lo abrió en la página que llevaba ese título.
Un trozo de papel algo quemado salió a la vista de ambos.
Scully lo leyó en voz alta:
-"Dentro de Toulouse, no muy lejos de Beluezer,
abriendo un pozo lejos en el palacio de espectáculos,
tesoro hallado, cada uno irá a contrariar,
y en dos lugares muy cerca del templo (castilo)"
-Espera, atrás lleva una dirección escrita! -Expresó Scully
con cierta emoción por obtener al fin algo concreto.- Es la dirección de un
barrio aquí en Georgetown... #2055!
GEORGETOWWN VIRGINIA
20:12 PM
Mulder detuvo el auto y revisó de nuevo la dirección. Ambos
se bajaron y se dieron cuenta que era un antiguo barrio de negros; había muchas
tiendas cubiertas de letreros alumbrados por luces de neon.
Scully miró a Mulder descepcionada, pero él siguió
inspeccionando. Sabía que alguna razón de ser tenía la dirección del papel. Un
señalamiento llamó su atención:
"To Lou's store à à"
Se acercó y leyó de nuevo. Tomó el papel, lo leyó de nuevo y
comparó los sonidos:
- To Lou's/Toulouse
Eso era! Era exactamente el mismo sonido!
Estaba a punto de llamar a Scully cuando alcanzó a leer
otro letrero en verde neon:
"Don´t be looser! Buy here all what you need for
winning in life!"
No podía creer lo que estaba leyendo. Volvió a comparar lo
sonidos:
-Be looser/Beluezer!
Releyó la primera frase de la cuarteta:
-Dentro de Toulouse, no muy lejos de Beluezer...
Inmediatamente llamó a Scully y le explicó lo que había
encontrado.
Entraron sigilosamente por la pequeña puerta de madera donde
estaba medio encendido el letrero "Lou´s store". A diferencia de los
demás locales, éste estaba completamente oscuro, no había luces ni lámparas.
Scully sacó su pequeña lámpara de bolsillo. Pudieron notar que era un cuarto
pequeño que terminaba en una lastimada puerta de madera. Entraron con las armas
entre sus manos. La sala estaba cubierta de de velas y veladoras dispersas formando
una estrella del David. En cada punta de la estrella y en los puntos del
pentágono del centro, se hallaban páginas blancas escritas con revelaciones
similares a las de los trozos de papel.
-Qué es esto Mulder?.- Preguntó Scully intrigada.
-Creo que lo que ha matado a estos hombres no es un
alguien... sino un.. algo.- Respondió Mulder mirando detenidamente cada rincón
de la oscura habitación.
-Mulder crees que... -Dijo Scully inconforme con la
respuesta de su compañero.
-Piénsalo Scully.- Interrumpió Mulder- Todos los que han
muerto se dedicaban a lo mismo...
-Videntes...
-Continuó ella
-Exacto!- Expresó Mulder volteando a ver a su compañera y
poniendo una mirada de las que solía usar cuando la trataba de convencer de
alguna teoría tan extravagante como la que estaba por decir. -Todos ellos
buscan premoniciones sobre el destino; tal vez buscaron demasiado.
-Qué quieres decir?- Preguntó Scully aún sin comprender a
dónde quería llegar su compañero.
-Nostradamus profetiza que él que encuentre el libro que
tenga los textos que contienen las claves del destino de la humanidad, morirá
con el ojo atravesado por un resorte. Tu ya lo has leído Scully, en el trozo de
papel que encontramos en la oficina.
Lo que le contaba Mulder hubiera parecido a simple vista, una
interesante historia de ficción, pero todas las "coincidencias" que
habían ocurrido ese día, le hacían comprender que era una teoría no totalmente
descartáble.
-Mulder... estoy de acuedo contigo en que estos homicidios
muestran señales de algún tipo de culto -Scully hizo una pausa y continuó-
pero... estás sugiriendo que estos hombres han sido asesianados por una
profecía del destino sólo por encontrar una verdad?
-Una verdad que no debía ser descubierta hasta dentro de 55
años.- Continuó Mulder alegrándose de que su compañera hubiera entendido el
mensaje.
De pronto, del pentágono central de la estrella, una luz
apantallante brotó. Se formó un cilindro de luz transparente. Del cilindro
comenzó a subir la imagen de un niño con el ojo izquierdo artravesado. Scully
tomó el brazo de Mulder sin despegar la vista del centro de la estrella. El
niño comenzó a acercarse temerosamente hacia los dos agentes. Scully dió un
paso atrás, pero Mulder siguió firme con los pies apoyados en el piso. Se veía
como un fantasma, muerto en vida. Ni las veladoras ni el fuego de éstas le
lastimaban. Se detuvo a un metro de distancia de ellos; estiró la mano derecha
indicándoles que tomaran el papel que lleavaba en ella. Mulder lo tomó lenta y
cuidadosamente. El niño dió la vuelta y regresó al centro de la estrella.
Mulder tomó el papel y lo leyó en voz baja, de manera que sólo Scully pudiera
escuchar sus palabras.
-"Cuando la lámpara ardiente de fuego inextinguible
sea hallada en el templo de las Vestales
niño hallar fuego, agua pasando por la criba,
peligro en agua de Nimes, trastorno en los mercados de
Toulouse."
En ese preciso instante, el salón comenzó a inundarse hasta
que el agua llegó medio centimetro antes del tope de las veladoras. Las hojas
de papel flotaban en un mismo sitio, imperturbadas por el agua. La luz
blanquisca y transparente se hizo más dilatante. Súbitamente el niño alzó su
mano izquierda y con ella la vista. Una antorcha encendida con fuego vivo se
reflejaba en su mirada diabólica... Volteó a ver a los dos agentes que yacían
petrificados mirando la escena y con el agua hasta los tobillos. Con la mirada
fija en los rostros de ambos, el niño estró lamano hacia el suelo provocando
así una corriente de fuego en toda la sala. Mulder y Scully miraban aterrados,
No podían moverse! Veían como el fuego se iba acecándo cada segundo más hasta
ellos; era como si el agua fuera el combustible del fuego! Era una guerra
imposible de ganar para ellos; el bien trabajando para el mal en un desafío del
destino. Segundos antes de que el fuego tocara sus pies, la aparición de otros
cinco cilindros de luz los distrajo del fuego mortal. Hombres fantasmas con los
ojos atravesados por resortes iguales, en cada esquina de la estrella; todos
mirando fijamente al niño de la mirada malévola. El fuego comezó a tocar los
pies de los agentes, quienes se retorcieron de dolor y de terror al ver que se
estaban enfrentando a una muerte que no les correspondía. Los cinco nuevos
cilindros se rodearon de agua. Gemidos de dolor y terror se escuchaban en toda
la sala! Él pánico se desenfrenaba en cada rincón de la candente sala. Una
explosión ensordescedora se escuchó en la sala mientras que los cinco cilindros
desaparecían en una llama fulminante. El fuego y el agua desaparecieron
también, dejando en la sala a los agentes y al niño cubierto de luz. Ambos
percibieron como el niño se volvía torbellino, y con la fuerza de su movimiento
circular, se abría en el suelo un agujero negro en el q entraba por él, el niño
tomando fuertemente entre sus brazos, un libro de portada marron. Bajaba
rápidamente por el centro de la estrella hasta que desapareció junto con el
torbellino de luz y el hollo negro.
Mulder y Scully se miraron con una expresión de terror y
asombro entremezclados. Por un momento se abrazaron brotando de los ojos de
ambos lágrimas desenfrenadas de confusión por lo sucedido... De pronto un papel
apareció a los pies de ambos. Scully lo recogió con la mano temblorosa y lo
leyó en voz alta.
-"El gran tápiz plegado no mostrará
más que a medias la mayor parte de la historia
apartado del reino, lejano, áspero parecerá
que durante la guerra cada uno querra creerlo a su forma y
su manera, pero la verdad será una...
aunque hay verdades que no se deben siquiera creer."
FIN
COMENTARIOS Y SUGERENCIAS PORFAVOOOR!!!!! A D_KEILAH_SARROBAYAHOO.COM